Cuando se le pregunta a Eduardo Gotthelf cómo es que un ingeniero en petróleo se dedicó a escribir, suele responder: «Me han hecho esa pregunta muchas veces. Y la respuesta es ¿por qué no? ¿Dónde está pautado que uno tenga que ejercer un solo rol en su vida? Soy escritor mucho antes que ingeniero».
En una charla con el diario «Río Negro», el autor rememora que empezó a escribir de joven; que antes de ser autor de minificción (o microrrelato), ya había editado «El sueño robado y otros sueños (1995), para que más tarde llegaran «Cuentos pendientes» (2009) y «Principio de incertidumbres» (2009), esa delicada rareza que tiene un formato similar al de las cartas en una botella («el escritor es un náufrago que no sabe a quién le llegará su escrito»). En el flamante «Paraísos paralelos», la ironía, el ingenio y el humor juegan y recrean diversas miradas posibles.
–Sus minificciones ofrecen lugar para la sorpresa…
–Muchas veces, es necesario releer porque sobre el final, la cosa parece que va para un lado y pega un viraje. Entonces, el lector tiene que poner en juego su conocimiento, los libros que lleva en la mochila, su sensibilidad e incluso el estado de ánimo de ese día y ese momento. Hay una escritora neuquina, Cristina Ramos, que dice que la minificción es una estocada. Una especialista en el tema, Laura Pollastri (profesora de la UNC), dice que se trata de un «pequeño manjar envenenado». Tengo una imagen que es menos poética, pero a la vez menos mortal y más nutricia –sonríe–: digo que la minificción es como un cubito de caldo concentrado. La sopa tendrá otro gusto con lo que cada uno tenga para agregarle.
–Es interesante la búsqueda de la palabra precisa y eso de generar reflexiones en un puñado de palabras.
–Cuando uno escribe, está tomando posición en forma condensada, diciendo «ésta es mi mirada». Hay gente a la que le ha parecido blasfemo o hereje este libro, porque Dios es un personaje de algunos de mis textos, pero no estoy hablando de «Dios»: estoy hablando del hombre –adelanta–. Este género tiene una enorme densidad de trabajo por palabra, de contenido y no se lo puede devorar rápidamente, porque el caldo perdería su esencia. Lo ideal sería leer uno por día. Darle tiempo.
–En una época en la que todo es inmediatez, ¿funcionarán mejor este tipo de textos?
–Como género, está muy poco difundido. Estoy empujando para que se lo conozca, porque creo que es una excelente puerta de entrada para los jóvenes a la literatura. Tuve contacto con algunos que han leído mis textos en clase y me sorprendió el enganche que tienen con este tipo de textos. Escuché mucho decir «los jóvenes hoy no leen». No es cierto que no leen y mucho menos que no escriben. ¿Dónde lo hacen? En Twitter, en Facebook, los SMS en el celular y todo esto tiene que ver con una necesidad de inmediatez. Lauro Zavala, escritor mexicano, dice que este es el género del tercer milenio. Tal vez sea un poco pretencioso, pero sí creo que es el género de estos tiempos, del siglo XXI, porque el insumo más escaso es el tiempo. Los cambios se suceden a una gran velocidad y corremos para adaptarnos.
Datos biográficos
Eduardo Gotthelf nació en Buenos Aires en 1945. Es Ingeniero de Petróleos y vive en la Patagonia desde 1974. Entre sus libros se encuentran: El sueño robado y otros sueños, Ediciones Culturales de Mendoza, 1995. Cuentos Pendientes, Ruedamares, 2007. Principio de Incertidumbres, Ed. de Autor, 2009. Paraísos Paralelos, Axis, 2012. Participó de las antologías: Letras de Ensayo, Talentos, 1992. 20 de animales, Sudamericana, 1998. Paleta de Poetas, Tribu Salvaje, 2007. Cielo de Relámpagos, Ruedamares, 2008. Estación trece, Fondo Editorial Municipal, Gral. Roca, 2008. La huella de la Clepsidra, Katatay, 2010. Grageas 2, Desde la Gente, 2010. Teatroxlaidentidad 2010-2011,2012. II Premio Internacional de Microrrelatos Museo de la Palabra, España, 2012. La dramaturgia de Neuquén en el desafío, Educo, 2012.
Otras publicaciones: Revistas Aleph, Argentina y en e-Kuóreo, Colombia. Diarios Página 12 y Tiempo Argentino, Bs.As., Diario de Mallorca, Palma de Mallorca, España, Los Andes, Mendoza, Crónica, Comodoro Rivadavia, Río Negro, Gral. Roca, El Liberal y Nuevo Diario, Santiago del Estero; y en diversos sitios de Internet.
El microrrelato “Fortaleza” fue interpretada en el Teatro Metropolitan, ciclo Teatro por la Identidad, Buenos Aires, 2011. El monólogo “Traslados” fue interpretada por Voces en Escena, Radio Universidad-Calf, Neuquén, 2010. Ponencia: “Construyendo ilusionismo concentrado. Minificción y Micromagia”, V Congreso Internacional de Minificción, Neuquén, Argentina, 2008.
Entrevista: PAULA GINGINS pgingins@rionegro.com.ar
FUENTE: Diario Río Negro