El astrónomo aficionado Erwin Schwab, que colabora con el programa de riesgo espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA), ha redescubierto un asteroide perteneciente a la categoría «potencialmente peligroso», que se perdió después de haber sido detectado por primera vez. El hallazgo se ha producido con el telescopio de la ESA instalado en el Observatorio del Teide (Tenerife).
Según ha informado la agencia espacial, Schwab estaba decidido a redescubrir el objeto, catalogado como 2008SE85. Este asteroide fue descubierto en septiembre de 2008 y su observación desde varios observatorios solo duro un mes, hasta que se perdió de vista.
El astrónomo aficionado planeó su secuencia de observaciones para buscar al asteroide dentro del área de incertidumbre que rodea a las predicciones de su posición y tardó unas pocas horas en hallarlo, a unos dos grados de distancia de su posición predicha -dos grados corresponde a cuatro veces el tamaño aparente de la Luna-.
«Encontré el objeto durante la noche del sábado 15 de septiembre, mientras comprobaba las imágenes en mi ordenador. Después lo vi de nuevo a la 01.30 horas de la mañana del domingo, que era mi cumpleaños. Es uno de los regalos más bonitos que he tenido», ha apuntado Schwab.
Las nuevas observaciones de este asteroide permitirán determinar su órbita de forma mucho más precisa, y confirman que no supondrá ninguna amenaza para la Tierra a corto plazo.
Los asteroides potencialmente peligrosos se acercan a la Tierra a menos de siete millones de kilómetros. Hay catalogados unos 1.300 objetos en esta categoría.
La ESA ha destacado que este tipo de descubrimientos forman parte de la «estrecha» colaboración que la agencia mantiene con astrónomos aficionados muy experimentados. Así, el jefe del área de Asteroides Cercanos a la Tierra de la ESA, Detlef Koschny, ha indicado que «no es la primera vez esta colaboración tiene éxito». «Los miembros del Programa de Búsqueda de Asteroides del Observatorio del Teide ya descubrió dos asteroides cercanos a la Tierra mientras trabajaban con el programa de observación de la ESA».
por Europa Press