El municipio neuquino lanzó un plan para recuperar los monumentos de la ciudad como puntos de atracción turística. Se colocarán lámparas LED, más intensas y de menor consumo. Ayer se volvió a inaugurar el mausoleo de Olascoaga, ubicado a metros de la Plaza de las Banderas.
Con el objetivo de poner en valor los sitios históricos y monumentos que pueden ser un punto de atracción turística de la ciudad, desde el área de Turismo del municipio se lanzó un plan de reparación de estos puntos estratégicos de la capital neuquina.
El primer paso de esta meta fue la restauración del mausoleo de José Manuel Olascoaga, ubicado a pocos metros de la Plaza de las Banderas, monumento que tenía sus puertas cerradas con candados por los actos vandálicos que sufría en forma permanente.
“Arrancamos con la inauguración de estos trabajos que consistieron en la refacción y restauración de esta estructura, además para poner en valor la vida del primer gobernador de Neuquén”, dijo el director del área, Juan Andrés, quien detalló que se restauró la estatua y los tres murales. También se abrieron las puertas y se colocaron balcones para poder tener una vista panorámica de toda la Plaza de las Banderas. Además, se pusieron carteles interpretativos de los murales, ya que actualmente no tenían ningún tipo de información.
En este contexto, se anunció que se iluminará con luces LED cuatro monumentos y el museo Paraje de la Confluencia. También se iluminará la fuente Cibeles, ubicada en Avenida Argentina casi San Martín, el monumento a la Madre y por último el monumento al general San Martín.
Más luz
Respecto del sistema de iluminación LED que se colocará en monumentos, Andrés precisó que se tiene pensado comenzar el trabajo partir desde agosto. «Estas tareas le van a dar a estos lugares ciertas características interesantes, como mayor claridad por la noche, y se verán mucho más llamativos y atractivos».
También se colocarán carteles ilustrativos en la fuente Cibeles y se está trabajando en un proyecto para resguardar el monumento al general San Martín, habitual objetivo de pintadas. “La idea es agregarle un componente más, que se trataría de una fuente y una cortina de agua que caerá por las paredes”, indicó el director.
FUENTE: diario La Mañana Neuquén
