Un día como hoy en el año 1846, el músico y fabricante de instrumentos musicales belga Antoine-Joseph “Adolphe” Sax patentó el saxofón. Su creación, debido a su tonalidad única y sonido distintivo, fue la primera en acortar exitosamente la distancia entre los instrumentos de viento de madera y los de bronce. La música del siglo XX hubiese sido muy distinta de no ser por las invenciones de Sax.
La patente de Sax concluyó en 1866, luego de ese año otros fabricantes de instrumentos experimentaron con su forma. Pero a pesar de los cambios técnicos que se realizaron, incluso mejoras en las teclas y la digitación, las que permitieron tocar secuencias más intrincadas, el instrumento casi no sufrió cambios desde su creación.
Aunque fue concebido teniendo en cuenta la música militar, a principios del siglo XX el saxofón encontró su lugar en el jazz y el blues. Sus cualidades sonoras demostraron ser especialmente adecuadas para el jazz y se convirtió en un componente esencial del género. La popularidad del instrumento continuó creciendo y en la actualidad algunos de los nombres más reconocidos de la industria de la música son saxofonistas, entre ellos John Coltrane, Sonny Rollins y Charlie “Bird” Parker.