La tradición norteamericana coincide con el Día de la Candelaria y se festeja en el continente desde 1887.
Este 2 de febrero se celebra el Día de la Marmota, también conocido como «Groundhog Day», una tradición que nació en Europa y luego se trasladó a Estados Unidos y Canadá, donde continúa teniendo una gran popularidad. La fecha además coincide con el Día de la Candelaria y se festeja en el continente desde 1887.
En principio estuvo relacionado puramente con los asuntos religiosos hasta que más tarde se asoció al animal con el pronóstico del tiempo, ya que se trataba de un sistema que utilizaban los granjeros para recibir la llegada de la primavera.
La mirada cristiana estaba relacionada con el reparto de velas bendecidas que encendían los creyentes. Se creía que tendrían un invierno largo si el cielo se despejaba. Los alemanes adoptaron esto y determinaron que si ese día había sol y una marmota podía ver su sombra, era indicio de que el invierno se extendería unas seis semanas más.
El animal, por su parte, se despierta de la hibernación el 2 de febrero. Así es como se guían con la predicción del final de una estación. El día, entonces, se debe a que fija la mitad del período entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera.
Si bien la celebración más popular se lleva adelante en Punxsutawney Phil de Pensilvania, más de una docena de estados celebran con sus propias marmotas, como el general Beauregard Lee de Georgia y Buckeye Chuck de Ohio. Allí, la mayoría de los participantes se visten de esmoquin y sombrero de copa y disfrutan de música, comidas y mucha diversión, esperando la predicción de ese año de la marmota oficial.
Al mismo tiempo, se pasan el tiempo mirando el comportamiento de la marmota. Si al salir de su cueva ve su sombra y regresa a ella, es seguro que tienen seis semanas más de frío, pero si no la ve porque está nublado y abandona su refugio, se considera que la primavera está próxima a comenzar.
Fuente: Ambito