Con sólo 13 años ya cuenta con nueve años de preparación, y espera llegar al planeta rojo en 2033. Tiene el apoyo de sus padres y la Nasa, a pesar que hay una posibilidad de no regresar.
A los 13 años, muchas niñas de octavo básico recién comienzan a experimentar los primeros pasos de la adolescencia, entre fiestas y pocas preocupaciones. Sin embargo, Alyssa Carson piensa distinto y ya tiene un objetivo claro: ser la primera persona en llegar a Marte.
Para ello, ha asistido a los tres campamentos espaciales mundiales de la Nasa y ha entrenado consistentemente durante nueve años esperando lograr su meta. Así lo cuenta en un cortometraje de la BBC, donde explica que quiere llegar a Marte por el sólo hecho que «es un lugar donde nadie ha estado antes».
Además del inglés, habla español, francés y chino. Su vida transcurre entre la preparación, los campamentos espaciales y algunas charlas donde intenta inspirar a otros niños a que consigan su objetivo, donde afirma que «el fracaso no es una opción».
El que haya sido la primera en asistir a los tres campamentos espaciales de la Nasa llamó la atención de la agencia, quien la toma muy en serio: «Tiene la edad perfecta para convertirse algún día en astronauta y llegar a Marte (…) está haciendo lo correcto, tanto en el entrenamiento como las medidas adecuadas para lograr su sueño», señala Paul Foreman, ejecutivo de la Nasa.
Su padre en tanto, indica que han hablado persistentemente con ella, considerando la posibilidad que al llegar al planeta, no pueda regresar. Por ello, cuenta que ya tienen los próximos 20 años planeados y apoyan su decisión, esperando que arribe al planeta rojo en 2033.
«Puede que no la veamos de nuevo. Hay una opción de ir a Marte y no volver, y hemos conversado de ello. Pero ella no ha cambiado de opinión», asegura.
Para ello, ha asistido a los tres campamentos espaciales mundiales de la Nasa y ha entrenado consistentemente durante nueve años esperando lograr su meta. Así lo cuenta en un cortometraje de la BBC, donde explica que quiere llegar a Marte por el sólo hecho que «es un lugar donde nadie ha estado antes».
Además del inglés, habla español, francés y chino. Su vida transcurre entre la preparación, los campamentos espaciales y algunas charlas donde intenta inspirar a otros niños a que consigan su objetivo, donde afirma que «el fracaso no es una opción».
El que haya sido la primera en asistir a los tres campamentos espaciales de la Nasa llamó la atención de la agencia, quien la toma muy en serio: «Tiene la edad perfecta para convertirse algún día en astronauta y llegar a Marte (…) está haciendo lo correcto, tanto en el entrenamiento como las medidas adecuadas para lograr su sueño», señala Paul Foreman, ejecutivo de la Nasa.
Su padre en tanto, indica que han hablado persistentemente con ella, considerando la posibilidad que al llegar al planeta, no pueda regresar. Por ello, cuenta que ya tienen los próximos 20 años planeados y apoyan su decisión, esperando que arribe al planeta rojo en 2033.
«Puede que no la veamos de nuevo. Hay una opción de ir a Marte y no volver, y hemos conversado de ello. Pero ella no ha cambiado de opinión», asegura.