Se estrena “Chimpancés”. La película de Disneynature sigue la vida de una familia de monos en el corazón de Africa. Chimpancés es un nuevo estreno de Disneynature que viaja a las profundidades de Africa para presentar la vida de Oscar, una cría de chimpancé, y sus lazos familiares.
Dirigida por Alastair Fothergill (Felinos de Africa y La Tierra) junto a Mark Linfield (La Tierra), el filme explora la curiosidad de Oscar, sus ansias de descubrimiento y la inteligencia e ingenuidad de los personajes del reino animal.
La familia del chimpancé Oscar recorre el complejo territorio de la jungla y, cuando debe hacer frente a un grupo rival de chimpancés, Oscar se queda solo y deberá valerse por sí mismo. “Todos amamos a Oscar desde el momento en que lo vimos”, cuenta Fothergill. “Hay algo divertido y un poco travieso en él; es muy decidido”.
Linfield dice que siempre quiso hacer una película de chimpancés. “No creo que pueda haber una temática de la vida silvestre más fascinante. Ellos pueden ser divertidos y tiernos, astutos, amorosos, competitivos, curiosos y llenos de diversión. Son como nosotros, o nosotros somos como ellos… Cuando los chimpancés nos miran desde la pantalla, es imposible no sentir una extraordinaria conexión y quedar completamente ligado a ellos” Pero descubrir a Oscar no fue fácil. Según Fothergill y Linfield, los chimpancés son sujetos desafiantes; son precavidos ante los humanos y notablemente difíciles de observar en la jungla.
Chimpancés se filmó en Costa de Marfil, más precisamente en el Parque Nacional Taï, situado a 100 kilómetros tierra adentro y designado como Patrimonio de la Humanidad por UNESCO en 1982. Es una zona de asombrosa biodiversidad, con cientos de especies de plantas y pájaros. También es hogar de una abundante población de chimpancés.
Fothergill y Linfield, quienes han rodado películas de la naturaleza en cada continente y en algunos de los entornos más hostiles del mundo, consideran que el Parque Taï fue especialmente agotador. “Una de las peores cuestiones es la inaccesibilidad absoluta al sitio -dice Fothergill-. Para llegar allí hay que conducir diez horas desde la ciudad más cercana, sobre un camino asfaltado. Luego hay otras cuatro horas de camino de tierra que, a veces, es intransitable. Y, si has llegado hasta allí, tienes aún una hora o más de caminata por un sendero que te lleva a la selva”.
Investigando la zona, “de repente llegamos a un claro iluminado dentro de la selva -cuenta Fothergill-. Sentados en torno al tronco de un árbol podrido hallamos más de 30 chimpancés. Estos iban a ser los chimpancés que los directores pronto conocerían por nombre: Freddy, el poderoso y respetado líder del clan; Oscar, el adorable jovencito, e Isha, su afectiva y cuidadosa madre.
