Rodrigo Abd fue distinguido por sus imágenes de Siria. Un español y dos mexicanos también premiados
Un fotoperiodista español, un argentino y dos mexicanos figuran en la lista de los ganadores de los premios Pulitzer 2013 que divulgó ayer la Universidad de Columbia.
El español Manu Brabo, el mexicano Narciso Contreras y el argentino Rodrigo Abd forman parte del equipo de cinco fotoreporteros de la agencia Associated Press en la guerra de Siria que logró el premio por el conjunto de una cobertura gráfica informativa.
Por otra parte, el fotógrafo independiente Javier Manzano, nacido en México, recibió el premio a una fotografía específica, por una imagen distribuida por AFP sobre el conflicto sirio.
Manzano, quien reside en EE.UU. desde los 18 años, logró en 2011 un tercer premio en una de las categorías del World Press Photo -el principal premio mundial de fotoperiodismo- por una estremecedora imagen de la cabeza de una víctimas de la violencia en México.
El fotoperiodista mexicano presentó por su cuenta la imagen que ganó el premio, y se trata de la primera vez que una imagen sola obtiene el galardón desde 1997, según indicó el jurado.
La fotografía muestra a dos milicianos de la oposición al régimen sirio que montan guardia dentro de un edificio de la ciudad de Alepo mientras la luz del sol entra en los agujeros de una puerta metálica situada detrás, creando unos dramáticos haces de luz.
Brabo, nacido en Asturias, tiene una larga experiencia en cobertura de conflictos y en 2011 fue detenido durante un mes y medio por la policía del régimen de Muamar el Gadafi mientras informaba sobre la guerra civil libia.
Por su parte, Abd, quien publicó también sus trabajos en La Nación , logró un tercer puesto en el World Press Photo de 2006 por una instantánea de las «maras» de Guatemala, así como numerosos premios en Argentina y en EE.UU. en los últimos años.
El jurado explicó que Brabo, Abd y Contreras, junto Jalil Hamra y Mohamed Muheissen, fueron premiados por la mejor cobertura gráfica por su trabajo para documentar el conflicto sirio, durante la que ofrecieron «imágenes memorables bajo un riesgo extremo».
El fotógrafo argentino Rodrigo Abd estuvo casi tres semanas reportando desde territorio controlado por la oposición en Siria, de donde escapó en medio del fuego enemigo. Abd, de 36 años, trabajó para La Nación y ahora se desempeña en la agencia AP.
En un relato de su viaje publicado por el diario porteño, Abd narró que «las explosiones iluminaban la noche mientras corríamos con la esperanza de salir de Siria después de haber pasado casi tres semanas cubriendo un conflicto que el gobierno de Bashar al-Assad parece determinado a impedir que el mundo vea. El fuego de los tanques estremecía las calles de la ciudad detrás de nosotros; las balas de los francotiradores pasaban silbando cerca de nuestras cabezas y los rebeldes que nos escoltaban casi habían agotado sus municiones. Parecía un buen momento para escapar de Siria».
Relató el modo en que debió sortear obstáculos para intentar salir del país en dirección a Turquía.
Señala: «Nos van a matar a todos», me dijo un aterrado activista sirio que estalló en lágrimas. Un combatiente rebelde dijo que las tropas del gobierno sin duda capturarían la ciudad, porque los insurgentes se estaban quedando sin municiones. Los heridos eran subidos en camiones que los llevaban a cualquier lado donde pudieran ser atendidos. Vi a un hombre cargar a un chico, con el chaleco ensangrentado. Supe después que el joven murió».
Para escapar, indicó que «tuvimos que llegar al túnel caminando, llevados por un combatiente del Ejército Libre de Siria».