La película protagonizada por Natalia Oreiro y Ernesto Alterio se quedó afuera de la preselección de candidatas. Latinoamérica está representada por la chilena «No», de Pablo Larraín.
Una mala y una buena. La película argentina Infancia clandestina, dirigida por Benjamín Avila y protagonizada por Natalia Oreiro y Ernesto Alterio, se quedó afuera de la preselección para los premios Oscar. Pero el cine latinoamericano de todos modos puede festejar: No, del chileno Pablo Larraín, sigue en carrera para buscar la estatuilla al mejor filme en idioma extranjero.
La película chilena que protagoniza Gael García Bernal gira en torno del histórico plebiscito de 1988 que le puso fin a la dictadura de Augusto Pinochet.
Es la única hablada en castellano que quedó entre las nueve finalistas. La selección final, que se anunciará el 10 de enero junto al resto de las nominaciones, dejará cinco para buscar la estatuilla.
Entre las nueve hay nombres de peso y de alto perfil, como la austríaca Amour, de Michael Haneke, y la francesa Amigos intocables (ya estrenada en la Argentina en agosto), que fue un fenómeno de taquilla en su país, con más de 20 millones de espectadores.
La lista de preseleccionadas la completan War Witch (de Kim Nguyen, por Canadá), A Royal Affair (de Nikolaj Arcel, por Dinamarca), The Deep (de Baltasar Kormákur, por Islandia), Kon-Tiki (de Joachim Rønning y Espen Sandberg, por Noruega), Beyond the Hills (de Cristian Mungiu, por Rumania) y Sister (de Ursula Meier, por Suiza).