Siete máximas y un artista:
1) Siento que pinto para la eternidad. 2) La pintura es una acto de reflexión y no un mero hecho visual. 3) El arte político es un bien de uso y no una mercancía. 4) El arte es compromiso. 5) La obra debe modificar en algo al espectador. 6) Las mujeres son asediadas por pirañas. 7) El arte es el lugar donde los símbolos adquieren un sentido.
Estas son algunas de las frases que mejor retratan al artista plástico Juan Urquiaga en una entrevista exclusiva para la revista Machete.
Todo eso se podrá comprobar cuando inaugure mañana jueves 13 su primera exposición individual, llamada “Tanatica”, nombre que tiene que ver con el dios griego Tánatos, quien representaba a la muerte. Es una serie de grandes dibujos, pinturas, técnicas mixtas, esculturas, objetos, dos videos arte y una instalación. En total, 25 obras. Todo un espectáculo visual que promete.
Originario de Tres Arroyos, provincia de Buenos Aires, Urquiaga llegó a Neuquén en el 2007 y en julio de 2011 formó la cooperativa de arte Wenüi, integrada por gente de la construcción y el arte, unidos por la necesidad de generar oportunidades laborales. “En el arte sino se trabaja en forma asociativa es muy difícil”, explica.
Urquiaga es un artista de fuertes convicciones. “Yo no propongo, sólo corro el velo desde un lugar en el arte. No hago un juicio de valor. No sé si lo mío es una propuesta superadora. Lo que hago es mostrar desde lo ideológico lo que vemos todos los días. Estoy en contra de la trata de persona, de la explotación de violencia hacia las mujeres. A favor de la igualdad y de la elección sexual.”
Se interesa por todos los temas marcados con la impronta de la injusticia y el sufrimiento. Cómo las relaciones que mutan del amor al dolor en las parejas o entre padres e hijos. Los conflictos con uno mismo y su propio cuerpo; entre la cultura y el cuerpo y éste con el poder.
Critica el sistema de hoy que “amordaza a los niños frente a la computadora”. Según Urquiaga, esclaviza al cuerpo por el consumo de la moda; generando una mecánica de poder. El sistema, por ejemplo, no se hace cargo que la educación forme un hombre integral.
En cuanto a la función del arte, explica que la estética y la belleza deben amortiguar la cruda realidad. El artista debe realizar una reflexión no panfletaria. “Soy un defensor del lenguaje del oficio, hay que dominar los elementos. El arte es un desafío contra la muerte y para eso tengo que saber el oficio. Soy un trabajador del arte”, expresa, finalmente.
La muestra estará durante un mes en el Museo Gregorio Alvarez, en horario de lunes a viernes de 8 a 20 hs. y sábado y domingos de 16 a 20 hs.
Me gusta este artista, siempre que expone voy a verlo y siempre me sorprende.
es un vendedor de humo…