Anoche quedó inaugurada la muestra de María Cristina Vega en el Museo Gregorio Alvarez.
Los caleidoscopios pueden jugar de maneras infinitas, sin detenerse, y transformarse en metáforas de la vida. O algo así imaginó la artista plástica Cristina Vega, quien creó una serie de obras en las que los colores y las mil formas se expondrán al público en la muestra «Idas y vueltas», integrada por 18 cuadros.
«La técnica que utilizo es el collage. Trabajo sobre tres ejes: rostros, laberintos y paisajes interiores o nuevos espacios. En esta oportunidad, presento una serie de caleidoscopios, que más allá de la fascinación que ejercen sobre mí, los considero como una metáfora de la vida, por su circularidad, por su ‘reinventarse’ permanentemente, por su eterno recomenzar, por su gran componente de azar y porque con los mismos elementos siempre aparecen diferentes figuras», reflexiona Vega
En la misma exposición presenta una serie de ocho piezas «realizada enteramente con estampillas, que no son pinturas, sino que el material es papel».
La muestra es el Museo Gregorio Álvarez (San Martín y Brown) de Neuquén, con entrada libre y gratuita, y podrá verse hasta el 12 de enero, de 8 a 20.