El CCK presenta 200 años: Pasado, presente y futuro, una reflexión sobre las diferentes producciones artísticas de los últimos dos siglos.
Por Leni González (Diario La Nación)
Año del Bicentenario: tiempo para mirar hacia atrás y hacia delante nuestra identidad, propuesta que Artes Visuales del Centro Cultural Kirchner (CCK) quiso investigar con la exposición 200 años: Pasado, presente y futuro, una reflexión sobre las diferentes producciones artísticas de los últimos dos siglos de la Argentina. Para organizar la narración del material de más de 50 artistas, entre fotógrafos, pintores, escultores, performers y videastas, la directora del área Gabriela Urtiaga dispuso la división en cuatro ejes distribuidos en ocho salas, cada uno con curadores distintos: Paisaje de nuestro territorio por Ana María Battistozzi; Identidad por Marcos López; Encuentros, donde se cruzan las instalaciones de Alberto Passolini y Pablo La Padula, e Innovación y futuro, por Rodrigo Alonso.
En Encuentros, el foco está puesto en el intercambio de tiempos y disciplinas. En la sala Gabinetes para una cartografía del Bicentenario se articulan tres mesas: una dedicada al arte originario, a cargo de Teresa Pereda, quien se formó desde su infancia en contacto con culturas precolombinas; otra a cargo del abogado y coleccionista Juan Cambiaso, que hace referencia al arte del coleccionismo, y una mesa a cargo de Pablo La Padula, dispuesta como una cartografía de las ciencias biológicas en interrelación con testimonios personales. En otra sala, la instalación de Alberto Passolini, Costera criolla, un rancho de adobe con un catre, un poncho, la pava y el mate, iconografía del gaucho y del campo, según la visión enciclopédica de las expediciones científicas de los siglos XVIII y XIX.
«Artistas viajeros miembros de expediciones científicas y militares trazaron los primeros perfiles de nuestras tierras y lo hicieron a través de convenciones y códigos de representación que, concebidos para otras realidades, a menudo se revelaron insuficientes para reflejar la nuestra. Esta exhibición trata de los diversos modos que encontró el arte contemporáneo para distanciarse de esos modelos fundacionales», dice Battistozzi sobre Paisaje, donde lo histórico dialoga con lo contemporáneo. Comienza con un grabado de la Gran Aldea en el siglo XVII, mirada extranjera que a partir del siglo XIX será repetida o cuestionada. Los distintos escenarios naturales y no naturales aparecen reinventados por artistas, de Prilidiano Pueyrredón, Juan Manuel Blanes y Pio Collivadino a Eduardo Stupía, Daniel Santoro, Luis Felipe Noé, Luis Benedit, Clorindo Testa, Mondongo y Andrés Paredes.
«La identidad argentina es un remix en constante cambio», dice el fotógrafo y pintor Marcos López, que en Identidad interpela la argentinidad con un work in progress donde reúne objetos heterogéneos de la cultura popular, obras de Antonio Berni, Grete Stern, Annemarie Heinrich, Sara Facio, más un kiosco de revista Gente, la tapa de Noticias con María Julia Alsogaray semidesnuda, los colchones de Kuitca y fotos de Mirtha Legrand, retazos de acá y allá que integran un todo reconocible.
Por último, Innovación y futuro, curada por Rodrigo Alonso, presupone la premisa de que el porvenir llegó hace rato. «Doscientos años son una perspectiva suficiente para reflexionar acerca de nuestro país, su historia y su potencialidad. Esta sección de la exposición sobre el Bicentenario plantea un recorrido aleatorio por imágenes, ideas, utopías, rarezas e inventos», dice Alonso, que partió de la frase del Manifiesto Invencionista de 1946 («Ni buscar ni encontrar: inventar») para proyectar la mirada a nuevos desafíos, con la participación de Carlota Beltrame, Proyecto Biopus, Cristian Turdera, Xul Solar y Raúl Lozza, entre otros artistas.
Borges revisitado
2016 no solo está marcado por el Bicentenario de la Independencia nacional. También por el 30 aniversario del fallecimiento de Jorge Luis Borges, hecho al que hasta fines de octubre el CCK rinde homenaje con la muestra Ficciones de un tiempo infinito, un recorrido por diferentes aspectos de la vida y la obra del escritor: su relación con las letras, las artes, la matemática y otras ciencias, el cine, la imagen clásica del laberinto y el atlas. Conferencias, clases abiertas, proyecciones, lecturas y performances, material documental, fotografías, cartas, primeras ediciones integran esta exposición donde también pueden verse obras que reinventan el mundo borgeano, como las instalaciones de Andrea Moccio y Leandro Erlich.
200 años: Pasado, presente y futuro. En el Centro Cultural Kirchner, Sarmiento 151. Miércoles a domingo, de 12 a 19. Gratis.